Asexualidad

Se puede ser trans y asexual

Una persona asexual no experimenta atracción sexual hacia otras personas. A diferencia del celibato, el cual la gente escoge, la asexualidad es una parte intrínseca de quienes somos. Hay una diversidad considerable dentro de la comunidad asexual. Cada persona asexual experimenta cosas como las relaciones, la atracción o la excitación de formas diferentes. La asexualidad no hace nuestras vidas mejores ni peores, simplemente nos enfrentamos a una serie de desafíos diferentes a los que se enfrentan la mayoría de los alosexuales (no asexuales). La asexualidad es distinta al celibato o a la abstinencia sexual, las cuales son comportamientos, mientras que la asexualidad es generalmente considerada como una orientación sexual. Algunos asexuales participan en relaciones sexuales por distintas razones.

La asexualidad no es blanco o negro, existe en la comunidad un espectro entre la asexual y la alosexual. El espacio intermedio generalmente se conoce como gris-asexual o grisexualidad, que también abarca demisexualidad y muchas denominaciones más.

Las personas asexuales sienten muchas formas de atracción, siendo la atracción romántica la más común. Las personas asexuales pueden desear relaciones cercanas y lazos de muchos tipos y formas.

Las personas asexuales que sienten atracción romántica las podemos clasificar hacia que género dirigen su atracción, pueden existir asexuales homorrománticas (asexuales lesbianas o gais), asexuales birrománticas, heterorrománticas,… e incluso hay personas (asexuales o no) que no sienten atracción románticas, se les conoce como arrománticas, que no va unida a la asexualidad ya que son orientaciones distintas.

Una persona trans puede formar parte del espectro asexual (asexual o grisexual), la orientación sexual, la orientación romántica y la identidad sexo-genérica son ámbitos independientes.